miércoles, 15 de marzo de 2017

Reflexión sobre los carteles de primavera 2017 anunciados por la nueva empresa de Las Ventas, Plaza1. Por la Asociación el Toro de Madrid


 Cartel del 2 de mayo. Obra de Mario Pastor


  No queremos dejar pasar la ocasión sin dar un repaso a los carteles presentados para los ciclos de primavera –Feria de la Comunidad y San Isidro-  como solemos hacer en la Asociación El Toro de Madrid. Este año con más motivo por las expectativas levantadas con la llegada de una nueva empresa, Plaza1, y las promesas que su máximo exponente, Simón Casas, ha ido proclamando en diferentes medios, incluida nuestra tertulia en Casa Patas. Así, vamos a dar nuestra opinión en los puntos que a continuación exponemos.

Feria de la Comunidad de Madrid.
    Nos congratulamos por la inclusión del hierro de Doña Dolores Aguirre, años ha que no lidiaba en nuestra plaza. Probablemente el toro Argelón fue el último que se jugó en Las Ventas con su divisa, en San Isidro de 2010, ejemplar que dejó recuerdo en los aficionados por su inconmensurable poderío. Sin embargo lamentamos que pongan una novillada de Sánchez Herrero, ganadería que lleva varios años en la Lista Negra de esta Asociación por su reincidente comportamiento blando, soso y colaborador.
  Respecto a la corrida Goyesca, una pena que no se anuncien toreros de Madrid siendo la fiesta de la Comunidad. Aun reconociendo que los espadas anunciados son valorados por la afición de Las Ventas vemos harto improbable que la plaza se llene. Se trata de una de las fechas más señaladas de la temporada madrileña en la que habitualmente, hasta la llegada de Taurodelta, se daban carteles de máxima expectación con los tendidos prácticamente llenos. Por lo que vemos, Plaza 1 continúa la línea de Taurodelta y sigue sin recuperar la importancia que la Goyesca merece. En el debe de los toreros comentar que se anuncian dos toros de tres ganaderías distintas, todas de la misma rama: Domecq. No le vemos mucho sentido, puestos a anunciar diferentes hierros lo suyo es poner sangres distintas y demostrar dominio sobre diferentes tipos de embestidas.

Los toros de San Isidro.
    Observamos una leve mejoría pero sigue habiendo muchas sombras. Por ejemplo, es una tomadura de pelo que se anuncie dos tardes a Núñez del Cuvillo cuando es incapaz de presentar una sola corrida como es debido, por no hablar del juego que suele dar. Ganaderías como El Pilar o Jandilla llevan unos cuantos años dando unos resultados lamentables en nuestra plaza, en presentación y bravura. A Las Ramblas y José Luis Pereda tampoco le vemos méritos. Lagunajanda, anunciada en feria después de una corrida bobalicona la pasada temporada en la que se fingió el tercio de varas toda la tarde. Vuelve Garcigrande tras unos años de ausencia, sabemos que a esta ganadería le cuesta rematar los toros en plazas de primera, sobre todo de los cuartos traseros, veremos... No nos gusta que el encaste Núñez se limite exclusivamente a la torada de Alcurrucén, porque hay más; igual que los murubes sean coto único de los rejoneadores y no se lidien a pie. Eliminando algunas de estas y anunciando otras que se han quedado en el tintero podría haber quedado un serial mucho más redondo en el apartado ganadero.
    Como hemos comentado, nos alegra el regreso de Dolores Aguirre, con la casta por bandera. El de Rehuelga es igualmente positivo, también el de La Quinta, que por lo visto en la Feria del Pilar de Zaragoza parece recuperarse de la excesiva nobleza y la sosería manifestada los últimos años. Y esperamos mucho de Miura por su 175 aniversario.
    Valoramos la dignidad de hierros como Palha y Baltasar Ibán, ausentes en este ciclo porque no tienen corrida a la altura de Madrid. Bañuelos, otra gran ausencia, sabemos que por climatología encuentra el punto de trapío requerido avanzada la temporada y esperamos que venga este año después del gran encierro que lidió en verano. Se echa de menos a Cebada Gago y, por supuesto, a José Escolar, que un año más deja Madrid por Pamplona (por algo será, señor Casas), aunque esperamos que venga después con algún toro. También se echa en falta alguna divisa portuguesa como por ejemplo Murteira Grave, el campo bravo lusitano cuenta con diferentes encastes que ampliarían el abanico del ciclo isidril. Tampoco vemos nada de líneas como Gamero Cívico, Pedrajas, Graciliano, Vega-Villar, Vázquez, u otras muchas… así que pedimos que para el resto de la temporada se cuente con sangres que no tienen su oportunidad en San Isidro.
   No debería haber distinción entre ganaderías “toristas” y “toreristas”, si bien hay un aspecto en la configuración de los carteles reprobable: desde el jueves 11 de mayo que hay una corrida de La Quinta hasta el sábado 3 de junio que se celebra una novillada de Flor de Jara, no hay ninguna ganadería de corte “torista”. Tanta distancia es larga para los aficionados que buscan este tipo de ganaderías, deberían intercalarse corridas de toda clase y no marcar tanto la división entre unas y otras. Además, no ayuda en nada a acabar con unos clichés que están perjudicando a muchos encastes y ganaderías.

Los toreros de San Isidro.
    Mal aquí Plaza1. Más de lo mismo. No ha conseguido anunciar a José Tomás, se le ha escapado Juan Mora y la mayoría de las figuras, por no decir todas menos Talavante, se anuncian pocas tardes y con escaso compromiso, en lo relativo al toro y a la competencia con otros toreros. En un ciclo largo como este, las llamadas figuras han de venir mínimo tres tardes y demostrar que pueden con todo tipo de ganaderías, como siempre hicieron los ases de incuestionable torería. Algunos abusan de las confirmaciones, como Juli, anunciado junto a dos confirmantes en San Isidro y en Beneficencia ante un público más fácil y festivo. Las llamadas figuras deben asumir el máximo compromiso en Madrid en vez de copar carteles de plazas de pueblo, anunciándose abundantemente a lo largo de toda la temporada (no solo San Isidro), competir entre ellas, con los toreros que vienen arreando y con las ganaderías no solo de su gusto, también las del gusto de la afición. Si no que no se llamen figuras.
  Luego hay toreros que desentonan en Las Ventas, como Cayetano, Francisco Rivera Ordoñez, El Fandi o Padilla. También mucho torero modesto para rellenar carteles en la que dicen que es la “Champions League” de la tauromaquia, sin confundir “torero de relleno” con otros que no tienen la etiqueta de “figura” pero sí mucho interés para el aficionado.  Echamos en falta, entre otros, a toreros como Javier Cortés, Emilio de Justo o Luis David Adame, una de las promesas y de los triunfadores de la temporada pasada. Sin olvidar a Sánchez Vara, muy digno frente a un encierro complicadísimo de Saltillo, que merecía reconocimiento por parte de la empresa.
   Admiramos enormemente el gesto de Rafaelillo anunciándose con Dolores Aguirre y Miura, hierros predilectos de la afición y muy exigentes. Al igual que el San Isidro que afronta Alejandro Talavante, anunciándose con lisardos, victorinos y ganado de Domecq, un total de cuatro tardes. El extremeño lleva un tiempo aspirando a consolidarse como “torero de Madrid”.
   A todos los toreros hay que recordarles que la lidia consta de tres tercios, se debe respetar la liturgia y no menospreciar el tercio de varas metiendo los toros debajo del peto, escondiéndolos, o dejando que acaben con ellos en puyazos sangrientos. Si no hacen bien las cosas en un escenario como la plaza de Las Ventas es porque no quieren y desdeñan su profesión.

La empresa.
  No vemos la cacareada revolución por ningún lado, sino más bien una línea continuista con la última feria configurada por Taurodelta. Esto no es lo prometido, señor Casas. Entendemos que en un ciclo tan largo es muy difícil rematar todos los carteles, pero la labor de un empresario fetén es conseguir lo que otros no consiguen, anunciando el mayor número de tardes de máximo interés, rivalidad y carteles del gusto de la afición de la plaza. En este sentido Plaza1 se ha quedado escasa y, en lo que a San Isidro se refiere, no vemos diferencia con lo que teníamos. Si notamos interés por incentivar la fiesta entre la juventud con el incremento de abonos para jóvenes; por estar en los medios de comunicación y en el boca a boca de la sociedad, aspectos sin duda positivos. Y cierta mejoría en carteles fuera de feria, una de las demandas más ansiadas que esperamos no decaiga y termine en el olvido.
   Demandamos a la empresa que cumpla con las ganaderías anunciadas y no haya cambios y escándalos de última hora, así como la presencia y el trapío sea el que corresponde a Madrid, especialmente los días que se anuncian las figuras.
  No nos parece correcto que se pongan a la venta abonos para San Isidro antes de que los abonados renueven los suyos o puedan mejorarlos dentro de un plazo exclusivo para ellos. El abonado debe tener preferencia.
   Y esperamos que la oleada triunfalista no repercuta en presión sobre el palco presidencial y que este actúe con total independencia y máximo rigor.


   Suerte para todos.

Obra de Mario Pastor

1 comentario:

Cárdeno dijo...

“No debería haber distinción entre ganaderías “toristas” y “toreristas”, si bien hay un aspecto en la configuración de los carteles reprobable: desde el jueves 11 de mayo que hay una corrida de La Quinta hasta el sábado 3 de junio que se celebra una novillada de Flor de Jara, no hay ninguna ganadería de corte “torista”. Tanta distancia es larga para los aficionados que buscan este tipo de ganaderías, deberían intercalarse corridas de toda clase y no marcar tanto la división entre unas y otras. Además, no ayuda en nada a acabar con unos clichés que están perjudicando a muchos encastes y ganaderías.”

Totalmente en desacuerdo, siempre igual “Madriz y cierra España” Madriz se cree el ombligo del Mundo, los Aficionados de Madriz y el resto,…. Los de Provincias aficionados de Talanqueras…, ya les vale!!!
Si amigos, sí que hay, -tristemente- ganaderías Toristas y Toreristas, así lo aseguran en sus declaraciones los propios ganaderos, unos seleccionan para los Toreros y otros,- los menos-, para el Aficionado. Otra cosa distinta es el juego que den los Toros en el ruedo y el poder que tengan, que a unas se les supone y a las otras, no.

El año que no agrupen las supuestas corridas Torista, un servidor, no ira, y muchos otros venidos de todo el orbe Taurómaco, tampoco, no se imaginan el esfuerzo –de todo tipo- que nos cuesta el desplazarnos de nuestros lugares de origen, ya lo hice durante 4 años y no pasa nada, y lo de poner los Rejones en Sábado antes de Miura, ya es para terminar de joder.

Que miren en las localidades próximas a la suya y comprueben de donde son los Aficionados que las pueblan, a no ser que a los Segovianos los asimilen como Madrileños.